Remembranzas

POR Juan Celso Carpio.

He aquí este lejano recuerdo; cuando joven, hubo derroche de energías y los amautas deseosos porque sus niños y esa juventud radiante de vida y felicidad empiecen a buscar aquellos caminos que los lleven en busca de una mejor calidad de vida; recuerdo las presentaciones teatrales que se realizaban en la Escuelita 845 de mujeres, que se encontraba ubicada en la plaza de Armas de Moho.

La presencia de maestras como Rosario Carpio de Valencia, Brisaida Rodrigo, Rosa Alaiza de Giraldo, Rosa Machicao de Jáuregui, Gumercinda Gálvez de Aróstegui, Olguita Zumarán, Nelly Angles, Virginia Amat , Zoraida Machicao y otras distinguidas maestras que en este momento se me escapan de la memoria por lo que les pido mil disculpas, les daban a la niñez un fragor y mixtura de prestigio saturnal ; asistíamos a las obras teatrales, que en ese momento aparte del fútbol era la única distracción que tenía el pueblo, ya que no contábamos con luz eléctrica, no se conocía aún la televisión; y la Radio, era la fiel compañera en la soledad de su cabaña de quienes querían escuchar música, deportes o noticias.

Todo el pueblo se proveía con velitas y/o mecheros a kerosene, acudían todas las familias al salón teatro portando sus sillas, bancas, banquitos, etc. etc., los estudiantes jóvenes y señoritas cual ramillete de flores perfumaba los ambientes donde se realizaban las actuaciones mostrando sus incondicionales dotes histriónicas y el público los premiaba con sus aplausos; eran tiempos en que nuestras autoridades eran las personas con solvencia moral y económica, dado que no recibían remuneración alguna y se movilizaban con su propio peculio por los pueblos y caseríos de su zona; el recibimiento a una autoridad departamental, por ejemplo, lo hacían con mucho respeto y honores, los vecinos brindaban su casita modesta muchas veces pero siempre con las puertas abiertas para honrarse con la visita de una Autoridad.

Es oportuno resaltar la entrega a su trabajo y responsabilidad de un ilustre vecino Don Miguel Angles que fue un digno Alcalde y lo digo no por mera diplomacia sino porque siempre ofreció su corazón en cada obra que hacía en beneficio de su pueblo; así también recuerdo sus conciertos y melodías locales, provinciales y regionales integrando el Centro Musical Moho donde resaltaba la muy conocida concertina, y traigo estos recuerdos para que las presentes y futuras generaciones valoren la entrega de tantos ilustres moheños para respetarlos, admirarlos; y sirvan de ejemplo, su sabiduría al transmitir sus enseñanzas a sus alumnos, junto al mensaje de lucha y superación sin temores con dignidad, esfuerzo y tesón  estos ilustres amautas que viven en mi recuerdo son: Enrique Carpio C, Carlos Mejía , Juan José Carpio, Alfonso Mamani, Rodolfo Cayo, Hugo Mansilla Huarcaya, Luis Gálvez C , René Rodrigo, Hugo Aróstegui, Pedro Cáceres, Alberto Machicao, Hugo Cutimango.

Se asomaba ya la tecnología, se iniciaba el éxodo de adolescentes y jóvenes (10 – 13 años niños aún) en busca de superación en centros de Educación Superior llámese colegios y universidades de todos ellos recuerdo a Ego Angles, Sandro, Hugo, y Edgar Machicao, Honofrio , Jaime Coacalla, Constantino Adolfo Ramírez, Edgar Olivera, Humberto Revegino, Renán, Hernán, Fernán Amat, Jorge, Miguel Carpio, Valentino, Arístides, Elizalde Salazar, José Blanco, Armando, Atilio, Winston, Félix, Santiago Machicao, Ulises, Héctor, Santiago Giraldo, Lucho, Carlos Angles, estoy omitiendo algunos nombres por que escapan a mi memoria y acudo a su rol infinito llenos de pura comprensión y espero su perdón.

Un día de diversiones urbanas en Moho es el deporte, el teatro, los paseos a los baños de Mucuraya, y Putina Cucho, Milli Milli, el molino antiguo, Mucuraya, y Supullullo fuentes de inspiración y deleite de los corazones enamorados, el fútbol interdistrital Moho- Huancané, donde varios camiones repletos de pasajeros alentaban a sus parciales que por lo general terminaban en agresiones colectivas propias de este encuentro, después de haber experimentado tales emociones abandonábamos la ciudad Chirihuana a veces felices por haber alcanzado el triunfo o un empate y otras tristes mordiendo el polvo de una derrota, sintiendo que nos revienta la boca de tanto gritar, cuando la sangre bulle por correr a prisa ante los absortos cielos, el CHINCARA, el MUTTO, el CAUNA, el ZORRO, el FARAMALLA, el MONSTRUO, CHIHUANCO ,el CCOLITO, CARAGALLO, el MONO, hasta el PERICO tenían despierto el corazón y no excluyo al FANTASMA, CERVEZA, CANADIO, el THINTTI, el MOCCO, el FIERO, el ÑATO, el CONDENADO, CHOCO, MOTO, CHUMPITAS, el THERMO, MUKII, TACPI, ACHACHILA, TOLCICITO , ISCA MUTTO, CHUPETE, BOCAY SAPO, el GATO, el ELECTRICO, el CHOLO, el TALEGON, el LIMEÑO, el CHATO, TAMBEÑO, el MUDO, el ESPAÑOLITO, CONEJO, CUTUTO, CORCHO, CHIPPA, CAPARELLE, el POTENCIA, el MANITO, el GRINGO, VIRGO, EL THAHUACO,tampoco se quedaba el SABAREN todos nos desgañitamos la garganta ante la euforia del ganador o la tristeza del perdedor.

Vaya chapas en mi pueblo en aquellos años que parecen ayer, y estoy convencido que se me han escapado muchas, sucede pues que las verdades suman pugnan por salir de la boca de un poeta, no en vano dijeron “ dadme la palabra justa y el acento justo, y moveré el mundo“ al apogeo desenfrenado y ciego de la palanca de Arquímedes, me estoy quedando corto, cuánto ingenio cuánta sabiduría deslizaban estos ilustres vecinos de Moho en cosas espirituosas, después de todo la pasaban alegres todo el día, hasta ahora creo sería motivo de discusión a raíz de un noviazgo repentino y se preguntaban si el amor nace instantáneamente o si requiere tiempo, los románticos siempre creerán en el chispazo Divino y los otros dirán que el amor nace por acto de nuestra voluntad y que no hay tal venida del Espíritu Santo.

Este fenómeno del amor era tema también de nuestros viejitos y se instala en nosotros como por asalto con todo su despotismo y contra nuestra voluntad, es la Ley del Amor o ¿es una excepción? Hay otros que dicen que el amor es un sentimiento raro; se podrá decir tantas cosas más, y tú ¿qué opinas?
Yo creo que nuestros viejitos nunca morirán del todo y la inmortalidad del alma es un hecho incontestable como Blanca Carpio, Enrique Carpio C por nuestras preocupaciones modernas no nos dejan tiempo para meditar en lo grandes que han sido pero esta inquietud trascendental es de ayer, de hoy, de mañana y siempre, que empieza a dejarse sentir en nuestros días, yo no tengo ningún sistema filosófico, ni soy un metafísico, ni un místico, ante todo soy ingeniero; amante de la naturaleza, de los paisajes que reverdecen luego de una sequía, un trovador que repito sesenta veces el mismo camino de la experiencia, que he llegado a conclusiones que contribuirán a fortalecer a la gente de fe, y de espíritu religioso que teme caer en un mundo exclusivamente supersticioso .

Enrique Carpio C el matemático nos mostraba su obra atiborrada de ecuaciones, raíces cuadradas y cúbicas y de otros signos cuya significación hemos olvidado, no se trata de una mera exaltación poética, por eso creían que cuando un hombre muere, queda muerto para siempre y que una vez enterrado asunto concluido, ERROR, Señor, ERROR, porque Enrique Carpio Carpio no fue un mortal común y corriente, los discursos y loas en su funeral no son aires que el viento se lo llevó, hoy cobra más vida porque está en nuestro corazón por que el fue ante todo el amauta, el maestro y que su alma vive en nosotros, no es el momento de explicarlo, posee una fuerza irradiante, como una lámpara como un calorífero.

¿Ud. no ha llegado alguna vez a ciertos sitios donde le parece haber estado antes? , indiscutiblemente que Ud. vio esos sitios en un sueño muy remoto, de ello puede estar seguro, lo que hay de particular en usted, esa pequeña nada que le da personalidad entre millones de semejantes, eso es perfectamente, usted trasladará el alma suya hacia otro; eso es todo. ¿Que se hacen al fin? Ellos se van, pero no pueden desaparecer, buscan otra envoltura para hallar de nuevo el equilibrio de una estabilidad, de una armonía provisoria.

Entonces le digo de nuevo, no morimos nunca completamente, y es que como un moheño enamorado de su tierra concluido sus estudios universitarios vino a prestar sus servicios como maestro primario, volcando toda su sapiencia, y bien que lo aprovecharon centenares de estudiantes moheños, juliaqueños y puneños; hoy, son profesionales en diferentes aéreas, viven agradecidos por el don mágico que les inculcó, y los que podemos contar esta historia, aplaudimos tan bella y robusta pasión; el vuelo de este amauta Enrique Carpio no hay por donde caiga, porque tiene de su lado la seriedad, el cariño, la inspiración de la vida, y es justo que lo recuerden para que ocupe un sitio de honor entre los mejores moheños.

Como si el tiempo no tuviese tanto que ver con la fe en la vida, nos queda el ensueño y la ilusión que no cuesta nada, ni una palabra ni leyenda escrita, que quede como una hebra de razonamiento, un poema o un episodio de gloria, que sus alumnos guiados por un genio propicio visitan gozosos y maravillados el campo santo de Laycacota donde descansan sus restos, y este será el punto de partida para construirle su morada definitiva y propia por encima de los tiempos y de él mismo marcando con honda huella su paso por la vida.

Un viento de perturbación sopla, con una velocidad que rebasa toda medida, y así es. Muchos sentimientos, temores, dudas, alegrías o angustias se experimentan al comenzar un nuevo año y sea propicia la oportunidad para estrecharlos en un fuerte abrazo y desearles un Feliz y Próspero Año Nuevo llenos de paz amor y felicidad.

Juancelso2004@gmail.com